¿Cómo calcular y alcanzar el punto de equilibrio en tus finanzas personales?

El punto de equilibrio en finanzas personales se refiere al nivel de ingresos y gastos en el cual no se generan ganancias ni pérdidas. Es el momento en el que tus ingresos cubren completamente tus gastos.

Conocer tu punto de equilibrio te permite tener un mejor control sobre tus finanzas y tomar decisiones más acertadas para alcanzar tus objetivos económicos.

¿Qué es el punto de equilibrio para una empresa?

El punto de equilibrio es el nivel de producción en el que los ingresos totales de un producto son iguales a los gastos totales, o la cantidad total de ventas que se necesitan lograr antes de comenzar a ser rentables.

Normalmente se expresa como el número de unidades de un producto o servicio que se necesita vender para que el negocio empiece a generar utilidades.

A continuación te explicaré cómo encontrar el punto de equilibrio para un solo producto utilizando la siguiente fórmula:

Punto de equilibrio = costo fijo / (precio del producto – costo variable). El precio al que se vende el producto menos los costos variables generalmente se denomina margen de contribución.

En otras palabras, se puede expresar como precio del producto – costo variable = margen de contribución.

Por lo tanto, el punto de equilibrio se calcula dividiendo el costo fijo entre el margen de contribución: Punto de equilibrio = costo fijo / margen de contribución.

Para entender mejor, veamos un ejemplo: Supongamos que a un restaurante le cuesta $8.000 preparar una pizza (costo variable como los ingredientes o la energía del horno), y la vende por $12.000. El margen de contribución sería (12.000-8.000) = $4.000.

Si los costos fijos del negocio (arriendo del local, salario del personal administrativo, etc.) son de $500.000 por mes, simplemente dividimos los costos fijos ($500.000) entre el margen de contribución ($4.000) para averiguar la cantidad de pizzas que necesitan vender mensualmente para alcanzar el punto de equilibrio.

En este caso, tendríamos:

$500.000 de costo fijo / $4.000 de margen de contribución = 125. Esto significa que el restaurante necesita vender 125 pizzas cada mes para alcanzar el punto de equilibrio. Si vende menos pizzas, sufrirá pérdidas, y si vende más, obtendrá utilidades.

Con el punto de equilibrio, una empresa puede determinar el precio de un producto y cuántas unidades debe vender, así como identificar y reducir potencialmente el costo fijo excesivo, lo que en última instancia permite que la empresa obtenga ganancias.

El punto de equilibrio en las finanzas personales

Técnicamente, el punto de equilibrio en tus finanzas personales sería establecer que tus ingresos y gastos sean «iguales» en un determinado período de tiempo.

Puedes calcular tu punto de equilibrio para cubrir solo tus gastos necesarios, o tu punto de equilibrio para cubrir tanto tus gastos por necesidad y gastos por deseo (aprende a diferenciar los gastos necesarios y gastos por deseos aquí).

Es importante que entiendas que la interpretación de tu punto de equilibrio es diferente ya que será el nivel para cubrir o solo tus gastos básicos (si lo calculas con tus gastos necesarios) o tu nivel de vida como lo llevas actualmente (si incluyes gastos por deseos).

A diferencia de una empresa, puede que tus ingresos no se calculen como precio unitario x cantidad, por lo que la definición de punto de equilibrio como número de unidades que necesitas vender para generar rentabilidad, no siempre tiene sentido.

Veamos cómo puedes entender tu punto de equilibrio de acuerdo a la naturaleza de tus ingresos.

Si eres un independiente y vendes servicios o cobras una comisión fija por cada objetivo que logres.

Por ejemplo, si eres un consultor y tienes una tarifa fija por cada empresa que atiendes, entonces puedes calcular tu punto de equilibrio de la forma tradicional para una empresa: «necesito 7 empresas clientes de mi servicio de consultoría mensual para mis gastos básicos». O si eres un vendedor de una máquina, y tu comisión por cada venta es más o menos constante:

«necesito vender 1 máquina cada 2 meses para cubrir todos mis gastos».

Si tienes un salario base más comisiones por resultados. Por ejemplo un vendedor con un salario base más comisiones porcentuales de acuerdo a su nivel de ventas.

Puedes entender tu punto de equilibrio como el nivel al que debes llegar en tus resultados de tal manera que tu salario más comisiones sea igual a tus gastos necesarios.

Por ejemplo: necesito vender $60.000.000 mensuales para que mi salario más comisiones cubran mis necesidades.

Si solo tienes un salario fijo, tu nivel de ingresos es muy constante y no puedes cambiar tu nivel de ingresos mes a mes. Tu punto de equilibrio lo podrías entender como el dinero que necesitas mensualmente para tu manutención.

Tus opciones para modificar tu nivel de ingresos generalmente están asociados a eventos más drásticos como un ascenso, un cambio de empresa o una renegociación de tu contrato de trabajo. Tu curva de ingresos se ve más como una escalera que una línea recta.

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¿Qué ocurre si te encuentras por debajo del punto de equilibrio?

¡Cuidado! Es crucial que tomes decisiones urgentes en tu vida para reducir tus gastos o aumentar tus ingresos.

Si continúas viviendo de esta manera, te verás obligado a recurrir cada vez más a deudas, las cuales a su vez generarán intereses y crearán un círculo vicioso de gastos que empeorará tu situación mes tras mes.

¿Qué sucede si estás en el punto de equilibrio o solo un poco por encima?

Alerta amarilla. En este momento, es posible que estés manteniendo tu estilo de vida, pero no estás generando lo suficiente como para ahorrar o invertir, lo cual es fundamental para construir un patrimonio y obtener ingresos pasivos. Es recomendable destinar aproximadamente el 20% de tus ingresos al ahorro o la inversión.

¿Qué ocurre si estás por encima del punto de equilibrio?

Felicidades, debes asegurarte de mantener esta situación y comenzar a evaluar opciones de ahorro e inversión que te ayuden a alcanzar tus objetivos financieros.

Si la excelencia es el resultado de nuestras acciones repetidas, entonces no es un acto, sino un hábito. Comenzar a llevar un registro de tus finanzas y cultivar el hábito de cuidar de ellas y analizarlas, a través de ejercicios como el punto de equilibrio, puede tener un impacto significativo en tu vida, más de lo que tal vez te imagines.

Comenzar con el punto de equilibrio nos permite comprender los límites mínimos y máximos de ingresos y gastos necesarios para mantenernos en una buena posición financiera. De esta manera, podemos avanzar gradualmente hacia el bienestar financiero.

Si deseas aprender más sobre estos temas, síguenos en nuestras redes sociales, déjanos tus comentarios, envíanos una foto de tus metas escritas, etiquétanos, ¡o como prefieras! Cuéntanos cuáles son tus objetivos financieros y qué planes tienes en mente.

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Hasta la próxima edición, se despide Mae. Y recuerda: El ahorro de hoy es el cumplimiento de tus metas y el bienestar del mañana.

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¿Qué ocurre si te encuentras por debajo del punto de equilibrio?

Si te encuentras por debajo del punto de equilibrio, es crucial que tomes decisiones urgentes para reducir tus gastos o aumentar tus ingresos, ya que de lo contrario te verás obligado a recurrir cada vez más a deudas y empeorarás tu situación financiera.

¿Qué sucede si estás en el punto de equilibrio o solo un poco por encima?

Si estás en el punto de equilibrio o solo un poco por encima, es posible que estés manteniendo tu estilo de vida, pero no estás generando lo suficiente como para ahorrar o invertir. En esta situación, es recomendable destinar aproximadamente el 20% de tus ingresos al ahorro o la inversión.